¿Cómo iba aquella legión a aprender las oscuras artes de la tentación? ¿De dónde podían obtener la guía y el entendimiento de sus difíciles misiones en el oblicuo mundo de los humanos? ¿Cómo sabrían si sus artimañas eran las más acertadas?
Para que el plan divino funcionara debía haber quien cumpliera la otra mitad del trabajo que en su impulso creativo Él no podía realizar.
Lucifer era díscolo e indomable y no muy dispuesto a dejar una huella clara para que otros las siguieran.
Así, con la conciencia de que todo oficio se aprende tras un duro proceso que incluye una enseñanza con un método y un sistema, el Altísimo inauguró la Escuela de Satanases.
LIGORIO DE TRÉNECA, 1999 "ESCUELA DE SATANASES" (Ed. Voutiria)
Para que el plan divino funcionara debía haber quien cumpliera la otra mitad del trabajo que en su impulso creativo Él no podía realizar.
Lucifer era díscolo e indomable y no muy dispuesto a dejar una huella clara para que otros las siguieran.
Así, con la conciencia de que todo oficio se aprende tras un duro proceso que incluye una enseñanza con un método y un sistema, el Altísimo inauguró la Escuela de Satanases.
LIGORIO DE TRÉNECA, 1999 "ESCUELA DE SATANASES" (Ed. Voutiria)