El ímpetu de
la expresión de la pérdida se funde con la extraña sensación de arrobamiento
que nos produce nuestra propia experiencia de dolor y para que el tiempo no
corra tan rápido apretamos con pasión el sufrimiento intentando vanamente
conquistar un presente eterno con la sombra de lo que fue.
VITTORIO
PROBO, 1934 “LA GUERRA Y OTRAS BELLEZAS” (Ed. Sampietro)