Estado
enérgico
noche de
metas
sabor
fantástico
rumiando
tretas
la
piedra de la traición
te convierte en lobizón
partiste entre cometas
Sigues
el tráfico
ves las
antenas
derramas
ácido
sobre
tus venas
La
herida te hace ver
ya nada
que perder
las
gafas te quedan buenas
Por mi parte, hasta siempre, despedirte
te quedas hasta el final, para
reconsiderar
el costo de traicionarse
el costo de traicionarse
Buscas
el mundo ideal
en tu
locura
te gusta
disparar
desde la
altura
cien
veces desde hoy
recuerda
bien quien soy
quien avisa perdura
Por todo
el tiempo y más
te
resquebrajas
y cubres tu piel
con mil alhajas
para
desconcertar
y al
barco amarrar
La esfinge de la mortaja
La esfinge de la mortaja
Y en tu boca, caramelo,
terciopelo
te olvidaste quien es, en el
mundo al revés
bailas sola bajo el cielo
Alguna
vez me fui
a Marte
en coche
y allí lo percibí
como un derroche
la rata
fue a dormir
te
quisiste morir
Cuchillos en la noche
Gotea el
ojo de Dios
quemando
nafta
persiste
en invitar
a su
comparsa
aquellos
que se dan
desnudos
como Adán
y
entregan a Eva en andas
Tus permutas, siempre atenta, ni
te inmutas
ya sabes que al nacer, se
encandila tu ser
la talla deja viruta
Por
suerte me cansé
de andar
a tientas
y nunca
más crucé
con
zorras muertas
salté
como un ladrón
mordiendo
mi porción
cruzamos
el vidrio a ciegas
Rompimos
el motor
quemamos
gomas
con cada
explosión
tu miedo
asoma
el costo es la razón
del miedo y la evasión
Cianuro
y canela en polvo
Entre muros, bien desnudos, aberrantes
como una piel sin luz, tu gato
Michifuz
nos transforma en meta mutantes.
MICHIFUZ, Letra y música LOS DRAGONIANOS
(Emilio Zatec & Victoria Mannera) DistriRecords, 2005